El Gobierno de Estados Unidos confirmó este miércoles el retroceso económico en el primer trimestre de 2022, que fue del 0,4 % con respecto al trimestre anterior, y elevó en una décima el ritmo anual de esta caída, hasta el 1,6 %.
Según los datos publicados este miércoles por la Oficina de Estadísticas Laborales (BEA) de EE. UU., este decrecimiento se produjo en un momento de resurgimiento de la pandemia con los casos de la variante ómicron y con otros factores como los problemas en la cadena de suministro.
Fueron varios los indicadores que empujaron la caída del PIB en los tres primeros meses del año, como las exportaciones, que decrecieron, como también lo hicieron el gasto público y la inversión privada.
Las importaciones y el gasto de los consumidores y la inversión fija residencial aumentaron, según esta estadística.