Cables diplomáticos filtrados por WikiLeaks revelaron que el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, creía que había un grupo de monjas en el país orando y rezando para que lo asesinaran, según un documento dado a conocer este lunes por el medio digital Confidencial.
Los cables filtrados revelan una conversación privada sostenida el 24 de abril de 2009 por el entonces embajador estadounidense en Nicaragua, Robert Callahan, y la anterior jefa de la Policía Nacional, Aminta Granera, tras la firma de la implementación de la Iniciativa de Mérida.
En el encuentro, según el diplomático estadounidense, Granera le dijo que Ortega, un exguerillero sandinista que se encuentra en el poder desde 2007, estaba 'completamente loco y que era una amenaza para el país'.
También le confió que Ortega creía que ella, como jefa policial, mantenía reuniones frecuentes con el embajador estadounidense para conspirar contra el mandatario sandinista, y que ese era su primer encuentro.