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Miles de personas, en su mayoría mujeres, abarrotaron este viernes el centro de Bogotá en una multitudinaria marcha convocada por el colectivo Mujeres por la Paz con el objetivo de apoyar el final negociado al conflicto armado colombiano y reclamar su participación en el proceso.

Pese a que la marcha también fue secundada por hombres, el foco de la convocatoria fueron las mujeres, que respondieron con creces a la convocatoria de la ONG y de la Alcaldía de Bogotá, que decretó día cívico y llamó a secundar la movilización aunque el alcalde, el exguerrillero Gustavo Petro, finalmente no acudió.

Bajo gritos de 'No parimos hijos para la guerra', las mujeres llegadas de varios rincones del país expresaron su deseo de alcanzar una paz con justicia social y reclamaron al Gobierno y la guerrilla un cese bilateral al fuego, así como la desmilitarización de las regiones.

Muchas de las mujeres que marcharon hoy en Bogotá eran de departamentos remotos como el Cauca, Meta, Vichada o Chocó, regiones muy castigadas por el largo conflicto interno y que han vivido en carne propia la violencia sexual, el reclutamiento forzado, así como los combates y bombardeos.

El protagonismo femenino en la jornada fue tal que hasta los policías antidisturbios que controlaban la marcha eran, en su mayoría, mujeres.

Deisy González, de la Asociación de Mujeres del departamento de Arauca (Amar), dijo a Efe que del proceso de paz del Gobierno con las Farc en Cuba esperan 'un beneficio para las mujeres, para la equidad de género'.

'Estamos luchando por una paz con justicia social, queremos la paz en todo Colombia, más en el departamento de Arauca, que hemos sido tan golpeados por la violencia', agregó González.

Por otro lado, los organizadores de la marcha denunciaron que 106 mujeres que viajaban en tres autobuses desde Arauca, en el noreste del país, frontera con Venezuela, fueron retenidas e interrogadas por la Policía en Chocontá, en las afueras de Bogotá.

En los últimos días, el presidente Juan Manuel Santos anunció que incorporará a una mujer a la delegación negociadora del Gobierno en el proceso de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), formado, hasta el momento, por hombres en su totalidad.