Reporteros Sin Fronteras (RSF) solicitó hoy a las autoridades colombianas que aclaren los ataques que se están registrando en Colombia contra los periodistas que cubren la expulsión de campesinos de sus tierras.
Su llamamiento tiene como detonante el tiroteo en que se vieron envueltos el pasado 3 de diciembre la periodista colombiana Deisy Rodríguez Lagos y el documentalista italiano Bruno Federico cuando cubrían la salida de unos campesinos de Pitalito, en el municipio de Chimichagua, al norte del país.
Según RSF, los periodistas que cubren esos desplazamientos de la población y la restitución de tierras quedan indefensos por 'la impunidad en que permanecen este tipo de casos'.
Rodríguez y Federico trabajaban en un documental para el Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) cuando, según el relato de la primera, 'dos hombres se pararon a unos 30 metros, empezaron a disparar', y posteriormente escaparon.
Esos disparos, según añadió su compañero, también fueron dirigidos contra los campesinos que les estaban enseñando sus tierras.
El ataque tuvo lugar tras la grabación de imágenes de parcelas cultivadas en la zona de la que habían sido expulsados los campesinos, que señalaron como autores del mismo a hombres a sueldo de Juan Manuel Fernández, un poderoso terrateniente señalado como responsable del desplazamiento de las familias de Pitalito.
'Los latifundistas y sus secuaces se comportan con frecuencia como predadores de la libertad de información en el continente', lamentó la organización en su comunicado.
