El ministro del Postconflicto, Rafael Pardo, conoció este jueves uno de los muchos proyectos agrícolas que, impulsados por la Unión Europea, han dejado atrás la coca para desarrollar cultivos legales, una experiencia que puede expandirse si se firma la paz con las Farc.
Pardo visitó la finca Sinaí, en la vereda de San Francisco, en San José del Guaviare, que tras años de sembrar coca ahora produce caucho, maderable y piñas, además de acoger un modesto número de cabezas de ganado.
Sinaí forma parte de los proyectos que financia la Unión Europea (UE) dentro del Programa Territorios de Paz, una de sus iniciativas para construir la paz en la regiones que Bruselas desarrolla desde hace dos décadas.