La Policía detuvo este sábado a 77 inmigrantes ilegales, de nacionalidad haitiana, dominicana y española, que se movilizaban por la carretera Panamericana, en el suroeste del país.
'Se pudieron detener 54 inmigrantes que hacían uso de vehículos afiliados a diferentes empresas de transporte público y se movilizaban sin la documentación requerida por las autoridades migratorias de Colombia', indicó la institución en un comunicado.
En un primer operativo, que se llevó a cabo en el departamento del Cauca, la Policía detuvo a 39 extranjeros, 38 de ellos de nacionalidad haitiana, y uno más de Republicana Dominicana.
Las autoridades hallaron a seis haitianos y un español en la localidad de El Bordo, que forma parte del municipio del Patía, y privó de la libertad a ocho haitianos más que se desplazaban de la ciudad de Pasto, capital del departamento de Nariño, hacia Cali, en el Valle del Cauca.
Según la investigación realizada por la Policía Nacional, 'los inmigrantes tendrían como destino final los Estados Unidos, tomando largas rutas de viaje desde Ecuador y valiéndose de las redes de migrantes que trazan sus travesías por vías fluviales y terrestres, sacando provecho de las carreteras suramericanas'.
De otra parte, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), Migración Colombia y tropas de la Tercera Brigada del Ejército Nacional capturaron en la vereda Mandiva, del municipio de Santander de Quilichao, también en el Cauca, a 23 haitianos, tres ellos menores de edad, que ingresaron de forma irregular a territorio colombiano.
Durante el operativo se detuvo a un colombiano que al parecer fue el encargado de conducir a los extranjeros por pasos fronterizos ilegales con el objetivo de dirigirse luego al Golfo de Urabá, en el noroeste del país, para continuar desde allí la ruta hacia Centroamérica.
En todos los casos los detenidos fueron dejados a disposición de Migración Colombia para realizar los trámites de deportación, mientras que el colombiano permanece bajo la custodia de la Fiscalía para que responda por el delito de 'tráfico de migrantes'.
Colombia está desbordada por una avalancha de inmigrantes ilegales, en su mayoría cubanos y haitianos, que en su tránsito hacia Estados Unidos atraviesan el país en dirección a la inhóspita selva del Darién para llegar a Panamá, cuya frontera fue cerrada hace casi tres meses.
La incesante llegada de inmigrantes ya perfila un escenario de emergencia humanitaria en la localidad de Turbo, el principal puerto de la región caribeña del Urabá, fronteriza con Panamá, donde un número indeterminado de cubanos permanece a la espera de continuar su viaje.
El pasado 28 de julio la Defensoría del Pueblo contabilizó 1.273 personas, entre ellas 260 menores de edad, hacinadas en una bodega de Turbo.
El Gobierno colombiano despachó hoy un avión de la Fuerza Aérea deportando a los primeros 14 cubanos que hacían parte del grupo presente en Turbo.