El Gobierno del presidente Santos y el Ejército Nacional de Liberación (ELN), la segunda guerrilla del país, se darán cita este martes en Quito por segunda vez para abrir una mesa de negociaciones que busca poner fin al conflicto que mantienen desde hace 52 años.
Será la segunda vez que las partes se convoquen para dialogar, tras un primer intento fallido previsto para el 27 de octubre del pasado año, cuando la no liberación del excongresista Odín Sánchez Montes de Oca, concretada la semana pasada por el ELN, llevó al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, a cancelar unilateralmente el proceso.
El político, de 61 años, permanecía en poder de la guerrilla desde abril de 2016, cuando se canjeó por su hermano Patrocinio, a su vez privado de libertad por el grupo armado durante dos años y medio.
Sánchez fue liberado el 2 de febrero y a su puesta en libertad se sumó este lunes la del soldado Fredy Moreno Mahecha, también cautivo de la guerrilla desde el 24 de enero.
El hecho fue destacado en redes sociales por el ELN y valorado por el jefe negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo.
'¡Hemos cumplido!', escribió en Twitter la Radio Nacional Patria Libre, emisora oficial del ELN.
Restrepo, de su lado, tuiteó: 'Buena cosa liberación del soldado en Arauca. Crea confianza para inicio de la mesa mañana en Quito con ELN. Repudio general al secuestro'.
Con estos precedentes, todo parece estar listo en Quito para la instalación de la mesa y el inicio de las conversaciones, que tendrán lugar desde este martes por la tarde en la hacienda Cashapamba, situada al sureste de Quito y propiedad de la Pontificia Universidad Católica de Ecuador (PUCE).
Para instalar de nuevo el proceso tras la convocatoria a la mesa de diálogo anulada en octubre, fue necesario que las partes reanudaran conversaciones exploratorias y alcanzaran un acuerdo mutuo que permitirá, al fin, el inicio de las conversaciones.
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El pacto, además de la liberación de Odín Sánchez por parte de la guerrilla, incluía el indulto del Gobierno a dos integrantes del grupo armado que fueron identificados como Nixon Cobos y Leivis Valero, quienes también quedaron en libertad el 2 de febrero.
El Gobierno colombiano busca con este proceso 'la paz completa', tras los acuerdos alcanzados en la negociación mantenida en La Habana con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El diálogo debe llevar 'al puerto de la paz' negociada y desarmada, y a conseguir que en Colombia se pueda hacer política sin armas, según manifestó Restrepo el 18 de enero, cuando se anunció la instalación de la mesa prevista para mañana.
El ELN, de su lado, espera que sirva para desarrollar una agenda de seis puntos 'cuyo propósito es superar el conflicto armado y crear condiciones para las transformaciones que dignifiquen a la sociedad y a la nación colombiana', dijo el mismo día el jefe negociador de esa guerrilla, Pablo Beltrán.
Brasil, Chile, Cuba, Noruega y Venezuela, además de Ecuador, son los países designados como garantes de este proceso de paz.