El presidente, Juan Manuel Santos, dijo este miércoles que según estudios Mocoa, la ciudad que fue devastada por una avalancha que causó más de 300 muertos, no tendrá que ser reubicada pero aclaró que las viviendas que están en zona de riesgo serán trasladas a sitios en los que no corran peligro.
Así lo aseguró el jefe de Estado durante una visita a Mocoa en la que pidió a todos los gobernadores del país que activen el sistema de gestión del riesgo ante las fuertes lluvias que caerán en el país en los próximos días.
'Sí se van a reubicar algunas de las propiedades y de las construcciones que están en las zonas de alto riesgo no mitigable, pero Mocoa no tiene por qué reubicarse', aseguró Santos quien se apoyó en estudios técnicos.
Igualmente dijo que se han identificado 12 puntos críticos en los que se están trabajando y que están siendo monitoreados por la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) y habitantes de la zona para reconocer represamientos de manera anticipada.
Dijo, además, que la población puede estar tranquila porque 'por ahora no hay ningún temor' y explicó que se ha dragado un kilómetro del cauce del río Mocoa para evitar que este tipo de situaciones se vuelvan a presentar.
Con expertos del Servicio Geológico Colombiano y el Viceministerio de ambiente se iniciarán análisis del cauce de los ríos. Por otro lado, se hará limpieza y proceso de asepsia en cercanías del cementerio Normandía con el fin de evitar situaciones de salud y propagación de enfermedades.
Inicio de clases. El Gobierno anunció además la reanudación de clases el próximo lunes 17 de abril, para lo cual se encuentran trabajando para adecuar las instituciones educativa.
Desde el martes se lleva a cabo el traslado de las personas que están albergadas en colegios al nuevo albergue habilitado llamado 'El Pepino', con capacidad para 500 personas.
Mocoa fue devastada el pasado 1 de abril por el desbordamiento de los ríos Mocoa, Sangoyaco y Mulatos, que pasan por la ciudad y que arrasaron 17 barrios a consecuencia del fuerte aguacero que cayó un día antes y los sacó del cauce.
Según cifras que maneja el Gobierno, el número exacto de fallecidos es de 320, d elos cuales 118 son menores de edad. Además Medicina Legal a hecho la entrega de 269 cuerpos. La tragedia dejó un total de 332 heridos.