En una reunión en la que participó el presidente Rafael Correa, los delegados del Gobierno Nacional y de la guerrilla del ELN instalaron hoy la segunda ronda de conversaciones en Quito, Ecuador.
Al inaugurar la cita, Correa reiteró que Ecuador recibe a los negociadores 'con los brazos abiertos', sin buscar protagonismo y con la única intención de 'tan solo servir'.
'Créanme que todos esperamos, con mucha ilusión, que esos diálogos, lo más pronto posible, lleguen a un buen fin, como ya sucedió con las FARC y que, nuestra querida Colombia, de un paso importante para encontrar la verdadera paz', aseguró el presidente.
El jefe negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo, ha manifestado que 'la intensificación del terrorismo ni amedrenta la mesa de Quito (…) ni facilita un pronto cese del fuego y de hostilidades como sería deseable, refiriéndose a las últimas acciones que ha realizado el grupo guerrillero como voladura de oleoductos y secuestros.
Puntualizó en ese sentido que 'después de que se haya transcurrido por un proceso de desescalamiento del conflcito, es decir, de que se hayan acordado programas que vayan sacando civiles no combatientes del conflicto, (…) llegaremos al cese al fuego y de hostilidades'
Restrepo también comentó que el proceso con el ELN es 'muy importante' para Colombia, pues después de tantas décadas de violencia y tensión, el país 'aspira a ir avanzando hacia la democracia' e insistió en que lo importante es que los conflictos se puedan tratar en democracia, de forma civilizada.
Pablo Beltrán, jefe de delegación del ELN, valoró por su parte que una reunión como la de hoy, en Quito, 'es inédita' y aseguró que ellos no están muy acostumbrados a citas como la desarrollada en la sede del Ejecutivo ecuatoriano.
Beltrán resaltó que lo que se haga en el proceso de paz en Colombia, necesariamente va a ayudar a Ecuador y los países vecinos y sobre todo a la consigna abanderada, entre otros por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), de hacer de Latinoamérica y El Caribe 'una región de paz'.
Se espera que dentro de los temas que se aborden en esta etapa estén los relacionados con el desminado humanitario y la finalización definitiva del secuestro.
El Gobierno de Colombia y el ELN abrieron el pasado 7 de febrero en Quito un proceso de diálogo encaminado a terminar con el enfrentamiento que han mantenido durante más de 52 años