Sandra Beltrán, hermana de Bernardo Beltrán, mesero del Palacio de Justicia cuyos restos fueron identificados recientemente por Medicina Legal como enterrados en la tumba del magistrado Jorge Echeverry en un cementerio de Manizales, criticó las investigaciones estatales por el holocausto perpetrado entre el M-19 y la fuerza pública durante el 6 y el 7 de noviembre de 1985.
Dice por ejemplo la familiar no entender por qué de acuerdo al informe forense el cadáver de Beltrán fue hallado supuestamente calcinado en el cuarto piso del Palacio de Justicia, cuando ellos vieron en las imágenes salir con vida a su ser querido tomado del brazo de un soldado que lo trasladó a la Casa del Florero, donde según las pesquisas se cometieron torturas y asesinatos por parte de la fuerza pública.
La hermana de Bernardo Beltrán -quien al momento de los hechos llevaba tan solo dos meses trabajando en la cafetería del Palacio, tenía 24 años y acababa de terminar sus estudios de restaurante y bar en el Sena- dijo a medios de comunicación capitalinos que 'el Gobierno lo que está haciendo ahora es tratando de cumplir una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos -Corte IDH-, más no por voluntad propia del Estado colombiano'.
Finalmente, lamentó la situación en la que quedó la familia del magistrado Echeverry, quien entra a ser considerado ahora como desaparecido en la toma y retoma del Palacio de Justicia.
