Compartir:

El ministro de Relaciones Exteriores, Carlos Holmes Trujillo, rechazó ayer la detención en Venezuela de los colombianos Leonardo Muñoz, fotógrafo y Maureen Barriga, periodista, así como la del español Gonzalo Domínguez, quienes trabajan para la agencia EFE, y exigió su libertad.

Trujillo explicó que desde que se supo de la desaparición de Muñoz, 'quien se encontraba cubriendo la situación de Venezuela para EFE, estamos atentos y al frente de la situación a través de nuestro Cónsul y nuestro Encargado de Negocios. Exigimos respeto a su integridad y a la libertad de prensa'.

Muñoz desapareció en la mañana de ayer junto con el motorista venezolano José Salas en Caracas, donde se encontraba desde el pasado 24 de enero, cuando llegó junto con otros dos compañeros desde Bogotá para cubrir las jornadas de protesta en el país vecino. El último contacto que tuvo el fotógrafo con el equipo de trabajo fue ayer sobre las 11:00 a.m.

El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela manifestó que 'mantenemos la alerta por la posible detención de un reportero gráfico de EFE. Colegas reportan que se lo habrían llevado de la Plaza Altamira de Caracas'.

El canciller Jorge Arreaza rechazó los señalamientos de Trujillo y dijo que 'algunos periodistas extranjeros han ingresado al país de forma irregular sin cumplir previamente con la respectiva solicitud del permiso de trabajo en nuestros consulados'.

Además, dos periodistas franceses fueron detenidos por autoridades venezolanas en las proximidades del palacio presidencial de Miraflores, en Caracas, confirmaron este miércoles a la AFP fuentes diplomáticas. Pierre Caillé y Baptiste des Monstiers, reporteros de ‘Quotidien’ –un popular programa del canal televisivo TMC– grababan imágenes en los alrededores del edificio, precisaron las fuentes. El martes en la noche también fueron detenidos en las cercanías de

Miraflores dos reporteros del canal público chileno TVN, Rodrigo Pérez y Gonzalo Barahona.

El gobierno de Maduro ordenó la deportación de Pérez y Barahona tras 'inexplicables 14 horas de detención', informó el canciller chileno, Roberto Ampuero.