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La Superintendencia de Salud impuso una sanción de primera instancia a la Clínica Materno Infantil de Esimed, tras la muerte de un bebé de 2 meses de nacido, a causa de quemaduras ocasionadas por una incubadora.

Casi 2.500 salarios mínimos legales vigentes, que estarían alrededor de 2.000 millones de pesos, sería la multa que debe pagar la clínica por la muerte del menor que falleció en agosto del año pasado. El recién nacido se encontraba en una incubadora debido al bajo peso y otras condiciones de salud, por las cuales requirió manejo hospitalario de este tipo.

'El menor cayó a la superficie caliente del dispositivo médico, ocasionándole quemaduras de primero y segundo grado en al menos el 40% de su cuerpo, razón por la cual tuvo que ser trasladado al Hospital de la Misericordia, donde murió tres días después', se explicó en un comunicado de la Supersalud.

Igualmente encontraron otras fallas, como el de los cuidados de enfermería prestados al menor pues el paciente debía haber tenido los rollos o nidos y no se usaron estos mecanismos de seguridad que debieron informarse al área de mantenimiento. 'Se identificaron incumplimientos en el manejo de la historia clínica del menor, porque se venían haciendo notas de evolución retrospectivas, y no guardaban su orden cronológico, trasgrediendo la inmediatez que requiere el diligenciamiento de los registros clínicos conforme a la normatividad vigente', añadió la Supersalud.