Al término de su reunión en Nueva York este lunes con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, el presidente Iván Duque anunció que pactaron un acuerdo marco de cooperación hasta 2023.
'Hemos adelantado una muy buena reunión con el secretario Guterres. Tuve el placer de trabajar hace 10 años en esta organización y tuvimos una conversación centrada en las relaciones que tiene Colombia con la organización, las cuales atraviesan por un muy buen momento, porque hemos tenido la presencia de muchas agencias de la organización haciendo un trabajo importante en nuestro país', afirmó el jefe de Estado tras el rifirrafe que hubo por las críticas que hiciera hace un par de semanas la ONU a Bogotá por la situación de derechos humanos en el país.
El mandatario anunció acto seguido sobre el pacto suscrito: 'se ha cerrado un acuerdo marco de cooperación por parte de la ONU y sus agencias en nuestro país para el periodo 2020-2023. Este acuerdo será el marco referencial de trabajo de la ONU en nuestro país y estará centrado en tres ejes'.
El primero, señaló el jefe de Estado, es el de paz con legalidad, 'para profundizar en nuestro territorio las políticas que tiene que ver con sacar adelante los PDET, avanzar en todas las políticas de reincorporación de aquellas personas que dejaron atrás la violencia, avanzar también en lo que tiene que ver con el catastro multipropósito, con la formalización de tierras y la inclusión en el banco de tierras para que puedan tener una conexión con la productividad agrícola en los territorios y todas las políticas que tienen que ver con proyectos productivos, que se armonizan con nuestra agenda Ruta Futuro, donde hay una mención especial al problema de las drogas y donde está esa agenda que va desde la erradicación, la sustitución, el desarrollo alternativo hasta la atención de aquellas personas que han sido afectadas por la drogadicción'.
Los otros dos ejes son los de la atención a la población migrante, 'considerando que Colombia hoy absorbe lo que es una proporción sustancial de la mayor crisis migratoria que haya visto América Latina en su historia reciente'. Y el de la aplicación de los objetivos de desarrollo sostenible en Colombia de cara al año 2030.
Por otro lado, dentro del primer bloque, uno de los asuntos que más preocupan a Naciones Unidas son los altos números de asesinatos de líderes sociales, un problema sobre el que ha venido alertando repetidamente.
Duque subrayó que esas muertes están vinculadas 'esencialmente a ataques de grupos armados organizados' que se nutren del narcotráfico y de la extracción ilegal de minerales. Además, defendió la actuación del Gobierno contra ese fenómeno y destacó que el número de asesinatos está reduciéndose, aunque dejó claro que no estará satisfecho hasta que sea cero.
Además, recalcó que la lucha contra el narcotráfico es vital y defendió que 'con coca no hay paz'.
'Nosotros encontramos un país que entre el año 2015 y el año 2018 vio cómo pasamos de menos de 60.000 hectáreas de cultivos ilícitos a más de 200.000. Hemos contenido ese aumento exponencial y seguiremos enfrentando ese flagelo con una política integral', señaló.
Esa estrategia, insistió, incluye la fumigación de cultivos de coca, un polémico programa que el presidente Duque ha recuperado, pero también muchos otros métodos como la erradicación voluntaria, la sustitución y programas de desarrollo.
Tras su paso por la sede de la ONU, el presidente colombiano tenía previsto dejar Nueva York este mismo lunes rumbo a México para una visita oficial que incluirá una reunión con su homólogo, Andrés Manuel López Obrador.