El partido político FARC denunció este domingo que dos de sus militantes fueron asesinados en el departamento de Bolívar, la misma zona del norte de Colombia en la que horas antes fue tiroteado un desmovilizado de la antigua guerrilla.
La senadora Griselda Lobo, de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), dijo en redes sociales que los asesinatos fueron perpetrados en una zona rural del municipio de San Pablo y que las víctimas fueron Omaira Alcaraz y el presidente de la Junta de Acción Comunal del caserío San Juan Alto, Fernando Gaviria García.
'Me informan que en (la) noche del sábado fueron asesinados el presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda San Juan Alto, del municipio de San Pablo, y Omaira Alcaraz, lideresa de esa comunidad, ambos militantes del partido FARC', escribió en redes sociales la senadora Lobo.
El sábado, Jorge Iván Ramos, desmovilizado de las FARC y miembro de la dirección nacional de ese partido, fue asesinado en el caserío de Palmachica, que hace parte del municipio de Santa Rosa, situado en la misma región del sur de Bolívar.
Lobo agregó que el crimen contra 'tres militantes de FARC en una misma región en cuestión de horas debe ser una alerta para las autoridades' y cuestionó al presidente colombiano, Iván Duque, sobre la situación al preguntar '¿cómo le decimos a nuestros compañeros y compañeras que estén tranquilos allá?'.
Señalan a paramilitares
Entre tanto el Congreso de los Pueblos, movimiento político y social de izquierdas, dijo en un comunicado que Alcaraz y Gaviria fueron asesinados por 'grupos paramilitares'.
El movimiento detalló que primero llegaron a la casa de Alcaraz a la que amarraron junto a su familia y luego fueron al centro del caserío en donde tenía Gaviria tenía una tienda.
'Al ingresar a la tienda uno de los hombres le ordena dirigirse a la casa de Omaira pero él se resiste a ir y de inmediato le disparan en el abdomen (...) y al correr para intentar salvar su vida, le disparan nuevamente con otra arma en la cabeza, propinándole un total de siete disparos', señaló el Congreso de los Pueblos.
Tras ese homicidio, los criminales 'regresaron a la casa de Omaira la sacaron a la puerta y la asesinaron'.
Según el partido, ya son 227 los exguerrilleros asesinados desde la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC, en noviembre de 2016.
El 31 de diciembre del año pasado la ONU alertó que en 2019 al menos 77 exguerrilleros fueron asesinados en Colombia, y denunció además 14 desapariciones y 29 intentos de homicidio.
El partido FARC también se pronunció por medio de una Carta abierta al Ejército de Liberación Nacional – ELN en redes sociales. 'El crimen cometido le hace un flaco favor a la consolidación de la Paz completa; hoy los enemigos del pueblo se regocijan ante estos dolorosos hechos'.