Después de una aparente acción de brutalidad policial, en la que un par de uniformados descargan en numerosas oportunidades y durante prolongado tiempo choques eléctricos de pistolas denominadas ‘taser’, falleció Javier Humberto Ordóñez Bermúdez, de 46 años, en hechos registrados en la localidad capitalina de Engativá.
'Por favor, ya', 'agente, le ruego', se le escuchaba decir el pasado martes en la noche a la víctima, ya inmovilizada en una calle del barrio Santa Cecilia, mientras dos policías lo atacaban indefenso e intentaban arrestarlo después de un supuesto altercado, al parecer por estar bajo los efectos del alcohol.
En un video de cinco minutos, grabado por testigos de la agresión, se ve cómo los policías someten a Ordóñez con violencia, justo cuando el país celebra el Día Nacional de los Derechos Humanos.
Ordóñez acabó arrestado y conducido a un CAI del barrio Villaluz, y luego llevado a un hospital, donde murió horas después.
Familiares y amigos de Ordóñez sospechan que la agresión en la calle no fue la única y dijeron que creen que en el tiempo que la víctima estuvo detenida pudieron haber continuado los abusos.
Ordóñez, de profesión abogado, trabajaba como taxista y tenía dos hijos de 11 y 15 años.
En varias ciudades del país hubo protestas por el indignante hecho.