El hecho de que el equipo América de Cali se haya coronado campeón del futbol colombiano este domingo en el estadio capitalino de El Campín, suscitó una serie de celebraciones que, tanto en Cali como en Bogotá, no acataron las medidas de bioseguridad recomendadas por las autoridades: hubo aglomeraciones, no se usó tapabocas y no se guardaron las distancias.
En Bogotá las reuniones de hinchas se presentaron más que todo en las afueras de los alojamientos de ambos equipos: América y Santa Fe, pero también hubo celebraciones en otras zonas de la ciudad y en los alrededores del estadio.
Por ello, helicópteros de la fuerza pública sobrevolaron las zonas de mayores aglomeraciones y personal uniformado de la Policía estuvo atento a la situación.
En Cali las celebraciones se presentaron en locales comerciales y en varias viviendas de la capital vallecaucana.
Esto aunque en ambas ciudades se dictaron restricciones a la movilidad y al consumo de alcohol, sobre todo porque en el departamento de la región Pacífica se tiene un 93% de ocupación de UCI y decretada la alerta roja y en la capital cundinamarquesa sube a un 65% la ocupación de las UCI.