Compartir:

Enfrentamientos armados entre bandas y el recrudecimiento de la violencia por el control territorial en la ciudad portuaria de Buenaventura, en el Pacífico colombiano, provocó una oleada de desplazamiento y una manifestación este viernes en rechazo a la violencia.

'Hemos evidenciado más de 30 casas desalojadas, vacías. La gente de la comunidad ha aprovechado el ingreso de autoridades para poder ir sacando sus pertenencias y poder desplazarse a otros lugares', comentó a Efe el personero de Buenaventura, Edwin Janes Patiño, durante una visita al barrio Juan XXIII donde se han presentado enfrentamientos los últimos días.

En las calles se pueden apreciar los restos de casquillos de bala y morteros, y las casas presentan ventanas rotas y paredes con huecos de los impactos, que 'dan fe de la situación que está viviendo esta comunidad', dijo Patiño.

Ante la llegada de las autoridades, muchos han aprovechado para regresar y recoger sus pertenencias, cargando televisores a los brazos o metiendo muebles en camiones para sacarlos de forma, esperan, temporal.

En el barrio se han vivido dos noches de disparos constantes, ráfagas y explosiones de granada, como relató Juan Valencia, uno de los vecinos, que ha huido con su esposa y sus ocho hijos, y volvió por la mañana para ver la situación de su casa.

'Uno con sus niños, vive unos momentos que nunca los ha vivido en su barrio porque uno ha vivido tranquilamente, uno vive unos momentos de pánico', dijo Valencia.

'No es solo los desplazamientos, aquí también hay unos confinamientos y una restricción a la movilidad porque están amenazados con que si se van, les ocupan las casas', denunció el personero, quien pidió una presencia efectiva de las fuerzas de seguridad.