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Ante el anuncio realizado por el Gobierno sobre la implementación del Estatuto de Protección Temporal para Migrantes Venezolanos, como mecanismo de regularización de esta población en nuestro país, la Conferencia Episcopal de Colombia y su Secretariado Nacional de Pastoral Social – Cáritas Colombiana, señalaron que se trata de 'una respuesta valiosa encaminada a fomentar la acogida, protección, promoción e integración de la población migrante'.

Los obispos del país consideraron al respecto que 'su implementación será un acto fraterno que abre las puertas para garantizar que esta población que llega a nuestro territorio pueda disfrutar de los derechos fundamentales de todas las personas y pueda acceder a oportunidades para una vida digna'.

Al respecto, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, director del Secretariado Nacional de Pastoral Social, manifestó que 'las personas que llegan a nuestro país como solicitantes de protección o de asilo y refugio se unen a un grupo muy importante de desplazados internos y de personas víctimas de la trata y tráfico de seres humanos, que enfrentan condiciones de exclusión social muy severas, de rechazo y estigmatización por parte de algunos sectores de la población colombiana'.

Por ello, añadió, la Conferencia Episcopal considera que el estatuto es un instrumento muy valioso para asegurar la acogida, la protección, la integración y la promoción de esta población.

'Será un gesto fraterno el ponerlo en marcha, desde todas las instancias del Estado colombiano. La sociedad colombiana debe hacer un ejercicio muy fuerte para garantizar que este estatuto sea realmente puesto en práctica y garantice los derechos de todos los migrantes', concluyó Henao.