Sin pulso se desplomó repentinamente el barranquillero Harold Vásquez Velázquez en la Terminal de Transportes de Ibagué.
El técnico en gestión de riesgo y manejo de desastres había viajado recientemente de la capital de Atlántico a la ciudad de Ibagué con propósitos personales, informó la Policía en un comunicado.
'En la terminal de la capital tolimense, sufrió una descompensación repentina que le causó un desmayo', se lee en el comunicado.
El patrullero Hernán Felipe Hernández, al percatarse de lo que estaba ocurriendo, fue rápidamente en busca del comandante de la Estación Terminal, el subcomisario César Augusto Narváez Correa.
'La patrullera Kelly Rodríguez, quien igualmente llegó para atender la emergencia, notó que el ciudadano no tenía pulso, por lo que el subcomisario acudió a sus conocimientos en primeros auxilios y comenzó las maniobras de reanimación cardiopulmonar', narró el ente policial.
Poco a poco, Vásquez Velasco logró recuperar la respiración y fue trasladado en ambulancia a una clínica de la ciudad, donde fue atendido por el personal médico.
'Tras recibir el tratamiento y permanecer en un periodo de recuperación, el ciudadano regresó a la terminal para agradecer y exaltar el trabajo del subcomisario y los patrulleros que le salvaron la vida. Además, decidió bautizar al subcomisario como el ‘Angelito de verde’', indica la Policía.
Narváez Correa hace parte de la institución desde hace más de 27 años, tiene en su hoja de vida 50 felicitaciones y más de 10 condecoraciones. Cuenta con cursos de primeros auxilios, atención de lesionados y manejo de incidentes. Además, es esposo y padre de un niño de 13 años y un bebé de año y medio.
'Nunca se cansen de la labor tan grande que realizan en todo el territorio nacional', expresó el barranquillero antes de abordar un bus de regreso a casa.
