Al término de un consejo de seguridad realizado en Corinto, Cauca, el presidente de la República, Iván Duque, adjudicó a las disidencias de las Farc la autoría del atentado terrorista con carro bomba ocurrido el viernes en esta población, que dejó 43 personas heridas.
'Este tipo de actos no son de revolucionarios, son de delincuentes, criminales, terroristas (…) no son ningunos revolucionarios, son criminales y los trataremos como son, porque en este país le pondremos final, de una vez por todas, a ese imaginario de cometer hechos terroristas bajo el nombre de revolucionario', aseguró el mandatario.
Asimismo, el jefe de Estado anunció que su gobierno redoblará sus esfuerzos para culminar con estos grupos criminales. 'El narcotráfico es el combustible de estos grupos, por eso hay que enfrentarlos sin vacilaciones, sin contemplaciones. Seguiremos adelante con nuestras políticas y ahí donde tengamos que emplear las herramientas de precisión las vamos a emplear, y que les quede claro que seguiremos destruyendo laboratorios, incautando droga, y los vamos a enfrentar donde quiera que estén'.
El mandatario, además, envió un mensaje de apoyo a la población afectada: 'Esta comunidad ha sufrido mucho históricamente por la violencia y aquí estamos para decirles que no están solos y no lo van a estar. La fuerza pública a qué viene a reiterar su compromiso de enfrentar estas organizaciones y proteger a la comunidad'.
Hasta $200 millones por información de implicados en atentado en Cauca
Duque agregó que 'este acto vil, miserable y cobarde lo vamos a reprender siempre con la solidaridad y la unión del pueblo colombiano contra la violencia. Los enemigos de la paz en Colombia son los que cometen estos hechos, los que quieren amedrentar al pueblo y que se nutren del narcotráfico, por eso aquí y ahora, le digo a esa unidad ‘Dagoberto Ramos’, a la ‘Jaime Martínez’, y a la ‘Narcotalia’ que los vamos a destruir por completo y a todas las células de disidentes también, porque este país no se va a dejar humillar más del narcotráfico'.
Desde la noche del viernes el presidente había anunciado que 'dio orden estricta' a la cúpula militar y al ministro de defensa, Diego Molano, de trasladarse hasta el municipio.
En el encuentro participaron, además, el ministro del Interior, Daniel Palacios, quien desde ayer, al igual que Molano, por orden del presidente, han estado presentes en la región.
Este hecho terrorista, según confirmó el ministro Molano, dejó 43 heridos tras la explosión que afectó al menos 8 casas, además de los daños a la sede de la institución municipal. Entre los heridos hay 17 por aturdimiento, 20 con lesiones leves y 6 heridos de consideración, 2 de ellos son atendidos en Cali y los otros 4 fueron llevados a Santander de Quilichao.
Por ello, el Gobierno nacional dispuso de una recompensa de hasta $200 millones para quienes que den informaciones relacionadas con estos cabecillas 'de modo que continúen las investigaciones y estas denuncias permitan avanzar en la judicialización de este macabro hecho', explicó Molano.