Xiomara Galván, tía de la pequeña Sara Sofia, desaparecida desde enero pasado en la capital, insiste en que su sobrina, cuyo caso ha conmovido a todo el país, sigue viva y por eso se fue a buscarla a Bucaramanga, desde donde han alertado de la presencia de una niña con características similares.
Aunque los detenidos madre y padrastro de la menor han asegurado que la niña 'murió' y que la echaron al río Tunjuelo, al sur de Bogotá, y a pesar también de que la Policía ha afirmado que la pequeña no ha salido de la capital, la familiar sigue la pista de un barbero del barrio Campo Hermoso, de la capital de Santander, que dijo haber rapado a una niña que podría ser Sara Sofía.
También se conoció en las últimas horas que la Fiscalía volvió a citar a indagatoria a Nilson Díaz, padrastro de la niña, en una diligencia dispuesta para el próximo 23 de abril en la Cárcel La Picota de Bogotá.
Carolina Galván, madre de la pequeña, ha dicho que luego de que hallaron a la menor 'muerta', Díaz la envolvió de pies a cabeza con una cobija azul, la metió en un costal y la dejó en la sala. Y dos días después le confesó que había tirado el cuerpo de Sara Sofía al río.
Las autoridades, por su parte, llevan varias semanas de búsqueda del cuerpo de la niña en el río Tunjuelo y no han podido hallar pistas del caso.
