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Íngrid Betancourt, uno de los rostros más significativos de los secuestros cometidos por esa extinta guerrilla de las Farc, lanzó sus observaciones al reconocimiento que hizo el antiguo Secretariado de las Farc-EP, en relación al caso 01.

En el marco de la diligencia No.16, la ex candidata presidencial consideró como una 'política oportunista' el hecho de que las Farc utilizaran de la debilidad de una secuestrada, en el caso de Clara Rojas, para fines políticos.

'No vamos a entrar en calificativos, aquí no entro a juzgar a nadie y mucho menos a mis compañeros de cautiverio, pero sí pienso que hay una responsabilidad mayor en el caso de Clara, creo que se tomaron decisiones inhumanas, como el hecho de autorizar que ella tuviera un hijo con un guerrillero', indicó Betancourt, en el relato.

La excandidata presidencial señaló que todo lo que vivió Rojas fue 'voluntariamente inhumano', pues el nacimiento del bebé fue un episodio 'traumático', que no solo la marcó a ella, sino al niño.

'Me queda claro que la decisión del secretariado fue abandonar a Clara a su suerte (…) esto lo que nos muestra es la frialdad humana con la cual se trataba a los secuestrados. Era como tener ganado encerradoy tener una vaca a la que pusieron a parir, esto es una aproximación a lo que fue. Es algo deshumanizante todo lo que nos sucedió'.

Frente al reconocimiento que hizo Rodrigo Londoño, Betancourt indicó que le pareció 'suficiente, amplio, pero sí siente uno una reflexión en torno al ejercicio que están adelantando'.

'Estos contrastes entre lo que ellos dicen y nosotras las víctimas podemos decir es muy importante para que Colombia sepa la verdad', aseguró Betancourt.

Para la excandidata, en parte del reconocimiento, se intenta hacer 'un lavado de manos' en relación a que 'era imposible saber lo que estaba pasando'.

'La voz de la mujer en la guerra y en Colombia, particularmente ha sido una voz disminuida y revictimizada', dijo Betancourt al citar el relato de una nueva que fue abusada sexualmente durante el secuestro, del cuál aseguró que la cúpula la extinta guerrilla minimizó.

'Esto es algo que no se puede aceptar, no vi muestras de compasión, no vi muestra de respeto. Eso dejó preocupada', dijo en cuanto al caso.