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El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Emiliano Rivera, habló en Riohacha de la masiva anulación de cédulas que realizó la entidad por trashumancia y dijo que el trabajo realizado fue 'rigurosamente técnico' y con 'altos estándares de calidad'.

Reconoció que hubo errores, pero indicó que para eso los ciudadanos tienen unos recursos que deben presentar, o votar donde lo hizo la última vez, porque no se quiere perjudicar a los ciudadanos de bien, 'sino perseguir este flagelo (la trashumancia) que sí existe'.

'Ahora no me vengan con el cuento de que excluimos gente que históricamente vivía ahí porque no tocamos el censo, sino los inscritos y si votaba ahí para qué se volvió a inscribir', anotó Rivera.

Estas declaraciones las dio en el marco de la presentación del Plan Democracia para Guajira, Cesar, Bolívar, Magdalena, Sucre, San Andrés y Atlántico, el presidente del CNE, junto con los altos mandos militares y los ministros del Interior y de Defensa.

Durante su intervención, el ministro del Interior Juan Fernando Cristo aseguró que en Colombia nos acostumbramos a un delito electoral que no existe prácticamente en ningún lugar del mundo y por eso resultaría difícil explicarle a un ciudadano de otro país lo que es trashumancia.

'Estábamos acostumbrados a que las mafias electorales que compraban votos al por mayor y por anticipado, trasladaran en buses a los ciudadanos como si fueran ganado de uno a otro sitio y así elegían alcaldes personas que no vivían en los municipios', manifestó.

El funcionario dijo que por eso hace seis meses comenzó este trabajo interinstitucional con la Fiscalía, el Consejo Nacional Electoral y la Registraduría que permitió la anulación de la inscripción de 1.533.000 cédulas aproximadamente.

'A las mafias les dijimos que iban a perder la platica y no pensaron que íbamos a tomar esta decisión, pues la perdieron', anotó Cristo.

Visitas Sorpresa a sedes de campaña. Rivera señaló que señaló que de los 112 mil candidatos inscritos en todo el país, solo unos 23 mil han reportado las cuentas de sus campañas políticas, lo que es un indicativo de que toca estar vigilante con estos gastos.

El funcionario anunció visitas sorpresas a las sedes de las campañas para revisar estas cuentas y evitar que 'el peso de la chequera se imponga sobre la fuerza de las ideas'.

Indicó que se firmó un convenio con la Procuraduría y con la Unidad de Información y análisis financiero UIAF, para llevar a cabo esta labor en la que la Policía a través de su inteligencia y la denuncia ciudadana, han sido muy importantes.

'Invitamos a todos para que denuncien los movimientos sospechosos de dinero en efectivo a través de las herramientas como Uriel y la aplicación Mapee que se puede bajar en los teléfonos inteligentes', manifestó Rivera.

'Anulaciones han generado mucho trauma y confusión'

La alcaldesa de Barranquilla, Elsa Noguera de la Espriella, se pronunció sobre la anulación errónea de las inscripciones a numerosos ciudadanos por presunta trashumancia electoral señalando que hubo improvisación por parte de las autoridades electorales.

'La gente está alterada y creo que hubo algo de improvisación, pero lo importante es que están viendo cómo subsanan. Cuando nos equivocamos, si corregimos esto se podría resolver. Por eso la recomendación es que todos los ciudadanos que tengan intención de voto entren a la página de la Registraduría y revisen el estado de su cédula', manifestó la alcaldesa.

Tal es el caso de Milta Tejeda Holguín, residente del barrio El Carmen, quien inscribió su cédula para votar en las elecciones del domingo en el colegio Sofía Camargo de primaria.

'El domingo a las 3:05 p.m. me llegó un mensaje diciendo que me habían anulado la cédula por trashumancia. Resulta que en 2002 registré la cédula en Juan de Acosta porque estaba trabajando allá, pero ese mismo año me vine para Barranquilla y vivo en el barrio El Carmen, he votado tres veces y he sido jurado he votado en las partes que he sido jurado, acá en Barranquilla', señala Milta.

Sostiene que su inscripción ha sido anulada antes pero que como la seleccionan como jurado de votación ha podido sufragrar sin inconvenientes en la ciudad de Barranquilla.

'Trabajo con la superintendencia de notariado y registro, pero como no tienen seccional aquí me mandaron para la oficina de instrumentos públicos de Barranquilla', asegura.

Milta dice que esta vez sí le preocupa la anulación de su cédula, ya que además de tener que trasladarse a Juan de Acosta para votar, señala que 'la trashumancia es un delito, por eso mandé mi recurso a la Registraduría, porque tengo pruebas para demostrar que vivo acá'.

Otro caso es el de Marta Luz Sierra Iriarte, quien asegura que desde hace 20 años se encuentra residenciada en Barranquilla desde que decidió venirse de su natal Sincé, en Sucre.

'Hace como 10 años voté en unas presidenciales en mi pueblo, desde entonces no sufragué mas. Este año decidí inscribirme en la registraduría que queda en la carrera 47 con calle 80, donde me llegó un correo confirmándome mi nuevo registro'.

Sierra aseguró que debido a los 'engorrosos' procedimientos y a la falta de tiempo no hará la diligencia correspondiente para saber qué pasó con esa anulación. 'No pienso perder una mañana de trabajo por un situación que ni se si me van a resolver para poder votar este domingo' aseveró.