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Para lograr ser cobijado con el beneficio de la libertad transitoria por parte de la JEP, el senador barranquillero Álvaro Ashton reconoció haberse reunido en 2004 con el exparamilitar alias El Médico y aunque aseguró que no hubo pactos por escrito, sí admitió que hubo consentimiento para obtener el respaldo de las AUC en las elecciones legislativas de 2006 a cambio de su voto y el ‘lobby’ ante el Partido Liberal para el apoyo a la Ley de Justicia y Paz durante su trámite por el Congreso.

Así lo aceptó el exparlamentario de 63 años –capturado el 10 de diciembre de 2017 y preso en la Cárcel la Picota de Bogotá- en un escrito allegado el tribunal de paz el 19 de noviembre de 2018, donde admite por lo menos una reunión en 2004 con Carlos Mario García Ávila, alias El Médico o Gonzalo –líder político del Frente José Pablo Díaz de las AUC-.

Contó al respecto Ashton que el inicio de sus nexos fueron una invitación de su compadre, Luis Francisco Romero Racedo, alias Lipa –condenado por su militancia y nexos con las AUC-, a una entrevista que se llevó a cabo entre junio y julio de 2004: 'No medí, y quizás fue mi omisión, el no imaginar las consecuencias que podría acarrearme esa invitación que me hiciera nada menos que mi compadre'.

Y agregó que en la reunión no hubo ningún documento suscrito ni tampoco una advertencia sobre una eventual retaliación por el trámite de la Ley de Justicia y Paz, 'trámite que era de interés de las AUC, como lo entendí el día de la reunión'.

Pero, reconoció, 'lo que sí podría decir es que hubo una actitud silente de mi parte, una suerte de tácita aquiescencia a la ‘cordial’ invitación de las AUC, cuando he debido asumir el riesgo, aun sintiendo el miedo de ese momento histórico de cooptación y de manera categórica haber rechazado tanto la amable oferta de colaboración, como la petición de ayuda legislativa; incluso, haber increpado a quien me había invitado, mi compadre (…)'.

'Hice política sin amenazas'

Alias El Médico, narró Ashton, dijo que lo iba a apoyar electoralmente en el Magdalena, ya que 'en cuanto a los votos de las AUC en el Atlántico ya estaban comprometidos con otros candidatos' y le dijeron al entonces representante a la Cámara y aspirante a senador que lo iban a poner en contacto con una comandante en el Magdalena.

Posteriormente, El Médico lo llamó y le puso una cita con la líder paramilitar en el Hotel American Golf –aparentemente en Barranquilla pero no se menciona la ciudad-, aunque señaló que esa reunión no se cumplió porque el contacto 'tuvo que resguardarse'.

En este sentido, Ashton afirma: 'Supe con el tiempo que se trataba de la señora Neyla Alfredina Soto Ruiz, quien manejaba en el departamento del Magdalena los apoyos electorales de las AUC y posteriormente se desmovilizó en Santa Fe de Ralito. Por eso creo que Carlos Mario García Ávila, alias El Médico, hizo algún tipo de gestión con esa persona, alias La Sombrerona. Nunca existió apoyo electoral directo, es cierto. Pero como explicaré más adelante, en todo caso sí tuve la oportunidad de hacer política en el Magdalena sin dificultad alguna ni amenazas'.

El expediente que llevaba la Corte

En la resolución de libertad transitoria al excongresista barranquillero, fechada el 26 de septiembre pasado y contenida en 36 páginas, la JEP cita algunos apartes del expediente que llevaba la Corte Suprema de Justicia antes de que el caso fuese remitido a la jurisdicción transicional.

Señala el tribunal de paz que la Corte consideró que hubo un concierto para delinquir entre Ashton y el Frente José Pablo Díaz de las AUC –que operó en Atlántico y parte del Magdalena- que conllevó a que recibiera de parte de esta estructura armada apoyo burocrático en el Hospital Materno Infantil de Soledad, y respaldo electoral en Atlántico y Magdalena, en contrapartida del apoyo legislativo del exsenador para beneficiar a las AUC en Justicia y Paz.

El máximo tribunal de la justicia ordinaria, indica la JEP, dijo que el Frente José Pablo Díaz manejó una comisión política como órgano encargado de establecer y mantener relaciones con políticos, según las directrices que alias Jorge 40, comandante del Bloque Norte de las AUC, le daba a alias El Médico.

Así -continúa el documento- llegó el medico Luis Francisco Romero Racedo, alias Lipa, amigo, compadre y copartidario de Ashton, a la gerencia del Materno Infantil en abril de 2004, por imposición de los paramilitares.

Pero además los vínculos y pactos de del exsenador liberal, señala la Corte, se materializaron con el nombramiento de Fabián Ashton Santos, sobrino del compareciente, como coordinador de uno de los centros médicos adscritos a esta institución, a cambio del 'voto positivo del congresista para la concesión intemporal e incondicionada del beneficio de la alternatividad penal para los desmovilizados'.

Sin embargo, Ashton no aceptó ante la JEP que el pacto hubiera involucrado los nombramientos de su compadre en el hospital y de su sobrino en los centros médicos. A lo que el tribunal de paz responde que la valoración de los efectos del acuerdo sobe cuotas burocráticas 'deberá ventilarse en el proceso de construcción dialógica que ya se inició' y le puso de presente al excongresista que 'esta jurisdicción no es el escenario exculpatorio o justificativo de unos hechos que deben ser aclarados y desarrollados en el ejercicio de una verdad plena a construir'.

El camino hacia la JEP

Ashton, economista y exrector de la Universidad del Atlántico, fue representante a la Cámara de 1998 a 2006 y senador desde entonces hasta 2018 –aunque fue detenido a finales de 2017 y suspendido como senador en abril de 2018-.

Su intención de someterse ante la JEP fue puesta en consideración desde el 15 de marzo de 2018, por parte de su abogado, Isnardo Gómez, luego de que la Sala de Casación Penal de la Corte hubiera decretado pruebas y ordenado su captura desde el 6 de diciembre de 2017 por el delito de concierto para delinquir agravado.

Previamente, el 24 de octubre de 2017 se había abierto otra investigación por el delito de cohecho por dar u ofrecer, por su presunta participación en la entrega de $600 millones al exmagistrado cartagenero de la Corte Suprema, Francisco Ricaurte, entre los años 2013 y 2014, para lograr el archivo de procesos adelantados en su contra, entre ellos el de ‘parapolítica’ por concierto para delinquir.

No obstante, el 7 de mayo de 2018 la Sala de Definiciones Jurídicas de la JEP rechazó la solicitud de sometimiento. Y el 21 de agosto la Sala de Apelación de la JEP revocó esa decisión y le ordenó a la Sala de Definiciones requerir a Ashton para que presentara la solicitud de sometimiento 'que deberá contener y expresar un compromiso concreto, programado y claro con la realización de los derechos de las víctimas a la verdad, la reparación y la no repetición'.

Por eso, el 24 de septiembre de 2018 Ashton presentó el escrito planteando una propuesta de colaboración. Y el 19 de noviembre de 2018, Bladimir Cuadro, otro de los abogados del exsenador, presentó la solicitud de la libertad transitoria. Pero el 25 de enero de 2019 la Sala decidió no concederle el beneficio de la libertad, y en cambio pidió presentar una ampliación de su programa de aporte a la verdad y solicitó a la Fiscalía la remisión del expediente por cohecho, por el ‘cartel de la toga’.

Finalmente, el 16 de julio de 2019 la Sala de Definiciones concedió el sometimiento de Ashton por ‘parapolítica’ y el ‘cartel de la toga’; ante lo cual el 2 de agosto el exsenador volvió a pedir la libertad transitoria y la Sala la concedió el pasado 26 de septiembre.