La Procuraduría advirtió que a la situación de Hospital de San Andrés de solo contar con 9 UCI para atender a los enfermos más graves de COVID-19, se le suma otro drama: con el inicio de las lluvias en la isla el centro médico se inundó.
Por eso el Ministerio Público lanzó un SOS luego de que una comisión del ente de control constatara en el Hospital Claren Lynd Newball que 'los consultorios, salas especializadas, zonas de archivo y los pasillos se inundaron. El agua escurría por las paredes, techos y aires acondicionados, con el riesgo adicional por el contacto con cables de energía'.
Precisamente, esta semana la Procuraduría urgió al Ministerio de Salud y a la gobernación de San Andrés a adoptar 'acciones urgentes, que garanticen la salud de más de 79 mil residentes y visitantes' por el incremento de más del 776% en contagios por COVID-19.
El Ministerio Público precisó que en los últimos 30 días los afectados pasaron de ser 172 a 1.336 y ya hay 14 muertes.
'El departamento solo cuenta con 13 camas UCI, 9 de las cuales están destinadas para la atención positivos para coronavirus, y 4 para otras patologías', se lee en el reporte.
Para el órgano de control es urgente que se logre una intervención inmediata al departamento, con el fin de evitar que la cifra de contagiados siga aumentando y que haya más víctimas fatales, 'teniendo en cuenta que la reapertura de vuelos comerciales y la llegada de turistas podría saturar la capacidad instalada de unidades de cuidado intensivo, que para la fecha tiene una tasa de ocupación de más del 50%'.
Y cuestionó de la Gobernación que el hospital haya construido un área de cuidados intensivos para 17 camas, que, seis meses después de declarada la emergencia sanitaria, no han podido ser habilitadas ante la falta de una planta de oxígeno adicional.
