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'No quiero que la gente piense que mi vida es perfecta porque definitivamente no lo es en lo absoluto', escribió Britney Spears en su cuenta de Instagram.

La publicación de la Princesa del Pop se da después de una agitada semana en la que pidió poner fin a la tutela legal por la que su padre controla su vida desde hace 13 años, al considerarla 'abusiva', 'absurda' y por la que algunos implicados 'deberían estar en la cárcel'.

La petición de la estrella, recordada por éxitos como Oops!...I Did It Again o Toxic, entre muchos otros, la hizo ante un juzgado de Los Ángeles durante una intervención telefónica llena de declaraciones contundentes como: 'no soy feliz', 'no puedo dormir' y 'me sentí drogada'.

Ahora, a través de sus redes, en las que sus seguidores han posicionado varias veces el #FreeBritney, la cantautora revela la pesadilla que ha tenido que vivir bajo la tutela de su padre, James P. Spears.

'Me disculpo por fingir que he estado bien los últimos dos años ... lo hice por mi orgullo y me avergonzaba compartir lo que me pasó', agregó la artista en su publicación. Cabe destacar que su abogado, Samuel Ingham, no formalizó la petición de Britney ante el tribunal y las dos partes volverán a reunirse en una fecha que aún está por fijar.

Una de las cosas que más llamó la atención en su intervención fue su afirmación de que en su cuerpo tenía un dispositivo intrauterino contra su voluntad que no le permite quedar embarazada.

James Spears fue nombrado tutor en 2008, a raíz de las crisis nerviosas de su hija que ocasionaron su traslado dos veces a un hospital para someterla a evaluaciones psiquiátricas. En ese momento su padre manifestó su preocupación por su salud mental y el abuso de sustancias.