El papa Francisco no pudo oficiar la Vigilia Pascual, de nuevo, por el dolor en la rodilla derecha que no le permite estar mucho tiempo de pie y en su lugar el oficio del Sábado Santo en la basílica de San Pedro fue presidido por el cardenal Giovanni Battista Re, que es el decano del colegio cardenalicio.
En la ceremonia de la Vigilia Pascual, uno de los ritos más largos y cargados de simbolismos de la tradición católica y en en que se celebra la espera de la resurrección de Jesús, Francisco sólo leyó la homilía y bautizó a siete adultos.
La gonalgia, el dolor en la rodilla derecha, que el pontífice arrastra ya desde hace meses, le impidió realizar los diferentes ritos de esta ceremonia después de los esfuerzos del Jueves y Viernes Santos, mientras que mañana se espera que Francisco celebre la misa de Resurrección e imparta la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro.