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Juan Manuel Santos, avisó hoy que las fuerzas de seguridad continuarán con sus acciones en la deprimida zona del Bronx, una de las áreas más peligrosas de Bogotá, que fue desalojada este sábado por 2.500 soldados y policías.

'La decisión de este Gobierno de profundizar, de intensificar las acciones en contra de los grupos armados organizados ilegales, el crimen organizado en todo el país, se ha intensificado. Estamos avanzando y no nos vamos a detener', aseguró el presidente.

Sobre la operación en el Bronx, zona de tráfico de drogas en pleno centro de Bogotá, a pocas calles de las sedes de los tres poderes, en la que fueron rescatados al menos 76 menores que eran forzados a practicar la prostitución, Santos dijo que se realizaron 'casi 30 diligencias de registro y allanamiento' contra tres bandas.

'Se capturaron los líderes de esas bandas y hay una operación que continúa, porque esta situación no se puede permitir, sobre todo en el centro de Bogotá, a seis cuadras del palacio presidencial', agregó.

En la operación de desalojo fue hallado un hombre que estaba secuestrado en el lugar, fueron retiradas toneladas de basura, decomisadas armas blancas, drogas, alcohol, máquinas tragamonedas y se expulsó a centenares de drogadictos.

En este sentido, el presidente hizo un llamado a la fuerza pública y la Fiscalía para que se mantenga 'esta dinámica' de operaciones 'y poco a poco vamos desmantelando estas bandas criminales, este crimen organizado donde quiera que esté'.

Según las autoridades, en el Bronx se celebraban 'fiestas' en las que participaban durante varios días menores de edad, muchos de los cuales se prostituían a cambio de drogas.

Entre los diferentes hallazgos de las autoridades, se encontró un túnel en una vivienda que comunica con una bodega y que se utilizaba para transportar droga, armas y personas sin ser descubiertos por la Policía.

El desalojo del sábado generó una tensión que desembocó un día después en un enfrentamiento entre centenares de personas sin techo que vivían en el Bronx y unidades antidisturbios de la Policía en pleno centro de la capital por recuperar el control de la zona.