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La amenaza no parece ser una alerta en un país en el que matan a los líderes sociales y defensores de Derechos Humanos. A Edis Manuel Caré Pérez, de 65 años, que era presidente del Consejo Local de la comunidad de Despensa Media (Consejo Comunitario de Curbaradó), lo asesinaron en una zona rural del municipio de Riosucio, en el departamento del Chocó.

El Consejo Comunitario de los ríos La Larga y Tumaradó (Cocolatu) aseguró que Caré 'recientemente había recibido amenazas de muerte por su ejercicio de liderazgo'.

Cocolatu explicó que en abril pasado habían advertido 'sobre las amenazas, los hostigamientos, la destrucción de bienes indispensables para la supervivencia y de ataques (...) por parte de terceros ajenos al territorio y grupos armados ilegales'.

No obstante, informaron que el pasado lunes dos hombres de civil armados irrumpieron en la vivienda de Caré, que estaba en compañía de su esposa e hijos. 'Procedieron a ultimarlo con seis disparos '.

Pese a que era una muerte advertida, Caré ese día fue asesinado.

La Guajira

Más arriba en el mapa colombiano atentaron contra una líder wayuu que también había sido amenazada.

Este martes Hortensia Urdaneta Pana, líder wayuu, fue víctima de un atentado cuando se movilizaba en el área rural de Riohacha, La Guajira.

El ataque a tiros por parte de dos hombres en moto se registró en la vía al sur de La Guajira, entre Cuestecita y La Arena, en el resguardo indígena Mañature, poco después que la líder estuviera en una jornada de salud en una de las comunidades de la zona.

Según testigos del hecho varios hombres armados atacaron a tiros la camioneta en la que iba, pero los miembros de su esquema de seguridad reaccionaron y evitaron que fuera herida, aunque el vehículo fue impactado por las balas en varias partes.

Según familiares de la víctima, ella había recibido amenazas anteriormente en el mes de mayo cuando entregaba ayudas humanitarias en una comunidad wayuu y le advirtieron que no fuera más porque iban a atentar contra su vida.

'Desde entonces tiene protección de la UNP, pero hemos pedido el cambio del vehículo por uno blindado y no lo han hecho', afirmó uno de sus allegados.

Urdaneta, así como otros líderes wayuu de La Guajira, se encuentran amenazados hace varios meses, según denuncias que han hecho, tanto públicas como a las autoridades competentes.

Recompensa por crimen en Santa Marta

Las autoridades en Santa Marta ofrecieron una recompensa de hasta $5 millones para quien suministre información sobre el paradero de los responsables del homicidio de la vicepresidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Monterrey, Rita Rubiela Bayona Alfonso, ocurrido en la noche del martes en el barrio Once de Noviembre.

El coronel Oscar Solarte, jefe de la Policía Metropolitana, indicó que en coordinación con la Fiscalía trabajan en el esclarecimiento del homicidio. La hipótesis que más fuerza coge en estos momentos es la lucha por el predio de un parqueadero ubicado en ese sector.

'Hay un parqueadero que se encuentra en extinción de dominio desde el 2002 y al interior también se han presentado invasiones y el conflicto con alrededor de unas 40 personas que han intentado tomar posesión del mismo', aseguró el oficial.

Indicó que el predio en disputa está a disposición de la Sociedad de Activos Especiales por el delito de narcotráfico desde hace 18 años. 'Ofrecemos cinco millones de pesos de recompensa por quien permita la judicialización y captura de los responsables de este hecho', dijo.

La alcaldesa de Santa Marta, Virna Johnson, repudió el homicidio y pidió a las autoridades celeridad para detener a los autores materiales del hecho.

Rita Bayona tenía 45 años y era natural del municipio de San Gil (Santander), pero tenía varios años de estar viviendo en la capital del Magdalena, donde se destacó por su lucha en defensa de los derechos de los habitantes del barrio Monterrey.

Su asesinato se produjo pasadas las 7:00 p.m. del martes, en momentos en que caminaba por la conocida ‘calle del café’, en el Once de Noviembre, y fue abordada por desconocidos que le dispararon a quemarropa.

Su cadáver quedó tendido en el callejón, mientras que los responsables huyeron a bordo de una motocicleta.

Recompensa de $50 millones tras asesinatos en Ábrego

Desde Ocaña, Norte de Santander, el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, anunció el ofrrecimiento de $50 millones de recompensa a quien dé información de los perpetradores de la reciente masacre que tuvo lugar en el municipio de Ábrego, en la que tres personas fueron asesinadas.

El ministro detalló que ya han sido identificados dos de los cádaveres encontrados en el Catatumbo, con impactos de bala en cabeza y tórax. Uno de ellos era un venezolano de 34 años y el otro un colombiano de 26 años. El tercer cuerpo no ha sido identificado.

Así mismo, Trujillo indicó que se ordenó el despliegue de la ‘Unidad Especial de Identificación, Ubicación y Judicialización de perpetradores de homicidios colectivos’ para dar con la captura de los responsables.

Agregó que instalarán una mesa de seguimiento con los ministerios del Interior y Defensa y la Fuerza Pública para revisar el cumplimiento de las recomendaciones de las alertas tempranas 024 y 034 de la Defensoría del Pueblo.

'En Ocaña y Ábrego, a raíz de este análisis, se tomarán medidas de movilización de la Fuerza Pública muy microfocalizadas para efectos de tener distintos resultados de control en la zona', anotó.

El jefe de la cartera de Defensa reiteró que lo que tienen en común las zonas donde han ocurrido las recientes masacres es la disputa del territorio debido al negocio del narcotráfico. Por eso insistió en que el Gobierno trabaja para que regresen las fumigaciones aéreas con glifosato, salvaguardando la vida del medio ambiente y de la salud, según aclaró.